Ir al contenido principal

 

¿Es la discriminación por error tolerable? 




La discriminación por error es la diferencia de trato desfavorable que se aplica a una persona (o grupo de personas) por creer que pertenece a un determinado grupo social, aunque realmente no forme parte de este grupo o no se identifique personalmente con él. 

Por ejemplo, la decisión de no contratar a una persona por simplemente creer que es homosexual, cuando esta persona realmente no tiene esta orientación sexual, sería una discriminación por error. Otro ejemplo podría ser dejar de lado a un compañero o compañera de clase con rasgos asiáticos por pensar que es de otro país y cultura, cuando quizás ha nacido en el nuestro o lleva prácticamente toda su vida viviendo en España. 

Por tanto, y respondiendo a la pregunta que titula nuestro diario semanal de igualdad de trato y no discriminación, la discriminación por error, por mucho que se trate de un error de juicio al encasillar a otra persona en un grupo que no le corresponde realmente, no es tolerable, y la comisión de este error por supuesto no excluye el carácter discriminatorio de la conducta. 

En el siguiente ejemplo que vamos a ver, os acompañamos un vídeo de Youtube de un hombre afroamericano, que sin tener ningún tipo de conducta violenta o infractora, es abordado por dos agentes de la policía que por el mero hecho de ser de raza negra creen que han encontrado a un sujeto buscado por la policía. A lo largo del vídeo vemos no solo que este hombre no solo no es sospechoso, sino que es agente del FBI. Se trata de un tipo de discriminación por error, asumiendo que por el hecho de ser de raza negra, la persona es un maleante. Puede también implicar a su vez dos discriminaciones implícitas: racial y de clase social. 




Es inimaginable la cantidad de veces que pueden repetirse a lo largo y ancho del globo  situaciones como la anteriormente expuesta, no solo en temas referidos a la raza, sino también a la clase social, al género, a la religión, opinión, etcétera. Es por ello que es fundamental educar en igualdad de trato y condenar este tipo de conductas discriminatorias, que se traten o no de un error, no implican por ello menos discriminación. También se hace necesario formar a todos los profesionales que tienen habitualmente trato de cara al público, para que se desprendan de sus posibles prejuicios a la hora de tratar con personas diferentes a ellos y aprendan a ser trabajadores neutrales y competentes. 

Es probable que todos en algún momento hayamos discriminado a alguna persona, incluso de forma inconsciente. Por esto es muy importante aprender los tipos de discriminación que existen y detectarlos a tiempo, para no caer en este tipo de actitudes nocivas hacia el resto de la sociedad. 


Entradas populares de este blog

Ella es Malala

Soledad

Clorinda camina sola hace la compra sola vive sola A sus ochenta y seis años con tres hijos y cinco nietos casi nadie la visita De vez en cuando la mayor pasa le trae una comprita y vuelve a marcharse, tan rápido como llegó Sus otros hijos viven fuera sus nietos, ellos siempre andan ocupados Clorinda no se queja cada día le duele algo pero sigue saliendo a la farmacia a su médico al súper del barrio Su vecina Maribel a veces la invita a un café charlan un ratito ríen cuando hay ganas y vuelven a sus quehaceres Hoy Clorinda no se siente con muchas fuerzas se ha levantado débil le pesan los años, los brazos y las piernas se siente sola, abandonada Necesita que su familia la atienda, pero no lo pide tampoco se lo ofrecen no le gusta molestar Mañana será otro día, se dice, intentando no pensar en su soledad